Cuando analizamos las etapas de aprendizaje musical, es evidente las diferencia entre niños y adultos.
El prejuicio que tienen los adultos para aprender a tocar un instrumento o a cantar aveces los hace detenerse al momento de fortalecer sus dones o talentos, en los niños no existe esta limitante por eso decimos que los niños aprenden más rápido.
Para las personas adultas, mostrar su talento no es tan sencillo de lograr como ocurre con los pequeños; así que entender el proceso de aprendizaje de cada uno, será de gran ayuda para orientar las Clases de música de acuerdo a sus necesidades
Etapas de aprendizajes en la música en niños y adultos
Aunque hay muchas diferencias en los métodos utilizados para la enseñanza de música, existen elementos claves en su proceso de aprendizaje de ambos:
Fuentes de estimulación
Tener una fuente de estimulación es esencial para aprender música. En el caso de los niños, se utilizan recursos de acuerdo a su edad, como canciones infantiles para activar su atención y así puedan conocer elementos musicales importantes como ritmo, la tonalidad, los compases, contornos melódicos, expresión y desarrollo perceptivo.
En las clases de música para adultos, se utilizan canciones y melodías más avanzadas, para mejorar el desarrollo auditivo o vocal, lo mismo ocurre para tocar un instrumento. La idea es que puedan ubicar en el instrumento lo que han escuchado en su cabeza, así como los movimientos precisos y automáticos para aprender melodías a través de la repetición y el razonamiento propio de cada instrumento.
Desarrollo melódico
De acuerdo al creador de los sintetizadores MOOG, las manifestaciones musicales pueden ser melódicas, armónicas o rítmicas, y él afirma que predominan las melódicas en las etapas de aprendizaje, por tratarse de una serie de sonidos continuos que se transforman en una sola entidad.
Para niños y adultos resulta más sencillo aprender motivos melódicos que incluye alturas, ritmo, timbre y un acompañamiento de fondo. Este aprendizaje puede ser no musical que proviene del habla, o musical como respuesta al oido o experiencia vivida con un instrumento.
Canto espontáneo
En el aprendizaje de música cantar espontáneamente una canción es de gran ayuda para analizar el color de voz, entonación, dominio verbal, actitud frente a los demás compañeros de la clase de música, este canto espontáneo por lo general viene acompañado de movimiento que ayuda al sentido rítmico.
A los niños esta actividad resulta parecerles muy divertida, y no sienten pena para hacerlo. Sin embargo, algunos adultos muestran ciertas restricciones al momento de expresar su canto espontáneo, ya sea por temor o pena a recibir una mala crítica o burla.
Imitación de canciones
Desde muy temprana edad los niños muestran interés en hacer una imitación de lo que escuchan, pero solo lo hacen por “repetición”. Los adultos, buscan reproducir con exactitud la voz de su cantante favorito y mantener la misma tonalidad. Al igual que si deciden tocar un instrumento.
En ambos casos, los Profesores de música los motivan a desarrollar su propio registro, para que puedan diferenciarse del resto en el ámbito musical. De esta manera, podrán ir creando su propio perfil musical, e incluyendo elementos que los permitan ser únicos para hacerse un espacio ante la competencia.
Finalmente, podríamos concluir que el aprendizaje de los niños es más vivencial; mientras que para los adultos debe orientarse a la parte práctica.